jueves, 19 de enero de 2012

El último escrito

Buen día a todos mis grandes lectores, mis fieles seguidores, mis amados ciberadictos (absolutamente nadie, ya lo sé, pero siempre me gustó jugar con esta broma jejeje).

En esta ocasión sólo me quiero despedir de este espacio; sólo por terminar con algo que comenzó hace tres años y medio...

Quiero comenzar agradeciendo a los grandes amigos que pude conocer en este camino; camino conocido e incierto, que siempre pensé que sabía su final pero que resultó completamente distinto a lo imaginado: simplemente increíble.

Quienes leyeron un poco de lo que en este espacio se escribió podrán notar que conforme pasaban los días el pensamiento del escritor se iba modificando y modificando. Quizá alguno pensará que se iba profundizando o elevando, dependiendo de la perspectiva; a mí me gusta pensar que sólo iba mutando, quizá evolucionando.

Después de estos tres años y medio en que estudié la Biblia (y un poco a las personas) pude ir notando lo que una convicción genera en la mente propia y en la mente de quienes rodean al que tiene dicha convicción. Como dije, fueron resultados inesperados. Pero, según mi apreciación, grandiosos.

Más que querer compartir dichos resultados, más bien quisiera hablar de la síntesis. Creo, y pienso que es mi última creencia (aunque uno nunca sabe), que los humanos podemos forjar el futuro, o un futuro, fundamental positivo (en sentido matemático) e infinitamente progresivo. Lo anterior no es una postura filosófica, sino un pensamiento analítico de lo que pude vivir en estos últimos tres años y medio: pude vivir la amistad, el compañerismo, la cooperación, la empatía: el altruismo por dentro y por fuera: definitivamente posible y definitivamente maravilloso.

La vida es mucho más que organizaciones sociales (como quiera que se llamen: gobiernos, países, religiones, empresas, etc). La vida es mucho más que ideas (como quiera que se llamen: constituciones políticas, dogmas, doctrinas, mandamientos, etc). La vida es mucho más que actos (como quiera que se llamen: tradiciones, rituales, ritos, deberes, etc). La vida es mucho más que palabras (como quiera que se llamen: discursos, predicaciones, conferencias, filosofías, este blog, etc). La vida nos pertenece y nos trasciende; estamos inmersa en ella y somos ella misma. Pero no somos nosotros como individuos, y sí: formamos parte y la complementamos a la vez: la vida es...

Queridos amigos, gracias por lo que ha sido, y gracias por lo que será: gracias por todo a todos ustedes.

Para siempre suyo: Juan Carlos

1 comentario:

Anónimo dijo...

Que tal Juan Carlos.

Muy buen articulo y ya vi algunos escritos que tienes aqui. Me gusta mucho el escrito de los 2 hijos.

Esta muy entendible. Gracias por compartir conmigo tus experiencias y por enseñarme a ver la vida desde otro punto de vista.

Saludos
Fernando Silva
Iglesia del Bosque